Paul McCartney - Flowers In The Dirt (1989)

"Enésimo resurgir del eterno ex-beatle. Flowers in the Dirt es una digno regreso a primera línea, octavo disco con los tics de las producciones de los ochenta, bien entendidos y cuidados, y también con su facilidad para la melodía, azúcar que no engorda"

Aunque pertenezco a la parroquia donde redoblan las campanas en el Mother de Lennon, siempre reconocí a Paul McCartney como a un gran artista en todas las acepciones posibles de la palabra, no sólo por el tándem que cambió la música, también por su gran trayectoria en solitario. Puede que se le trate a niveles masivos con cierta condescendencia, como si lo hecho después de los Beatles no tuviera importancia, pero escuchad ésto, el día que Macca no esté se le llorará tanto o más que a Lennon, las cosas como son, porque su legado en solitario es de una gran consistencia y tiene en su haber discos de un hondo calado.

Soy del 75, y eso conlleva un matiz circunstancial insalvable, más que nada porque mi adolescencia transcurrió entre finales de los 80 y principios de los 90, como entre dos aguas. Al tiempo que absorvía todos los clásicos de obligado conocimiento, los artista de aquellos años entregaban algunos de sus discos de bajada o/y se encontraban en un momento decisivo de su carrera, U2 con The Joshua Tree, imposible no haberse empapado con ese disco en esa época, Tunnel Of Love de Springsteen, disco con el que le conocí y punto en el que todo el mundo coincide que terminó la magia (aunque nunca me cansaré de reivindicarlo), Queen y The Miracle en su día lo machaqué bastante, también el último renacimiento de Roy Orbison... Una época difícil de encuadrar en algún movimiento generacional, muerto el punk, y ya lejos la intensidad new wave y post punk, el laca'n'roll ya daba risa y el nuevo rock americano era cosa de iluminados, en aquel momento solo Guns n'Roses mostraron un breve e intenso fogonazo. En esa tesitura encontré Flowers In The Dirt y me acompañó.

Y mirad que podría haber presentado a Macca por primera vez aquí y de largo con RAM, London Town o Tug Of War, sería lo propio para dar consistencia a tal reivindicación artística y yo quedaría de molón resabido, pero no, andaba flipándolo en aquellos años con los Beatles, descubriendo de manera consciente su importancia en el rock al tiempo que Paul McCartney entregaba este Flowers In The Dirt, del que cuentan los cronistas que fue el regreso a un buen estado de forma y a las giras después de demasiados años, yo solo sé que sonaba mucho por la radio, por tanto cogí el disco como una verdad absoluta y con mucho entusiasmo, para mí con ese plus de los discos compañeros que ponen banda sonora a una época determinada, en mi caso a la edad de la ingenuidad.


Lo alternaba con el Tunnel Of Love por las noches en una radio-cassette doble pletina que colocaba entre el cojín y el cabezal, entonces escuchaba el pitido del tren sonando allá a lo lejos, me servía de interruptor mental, recuerdo el alivio del frescor que entraba por el patio de luces, estaba en casa, estaba a salvo, daba al play con aquel fuerte click y dulcemente me acompañaba en la duermevela. Cosas de la tontería juvenil, con el tiempo incluso lo dejé olvidado a propósito como si ese sonido acomodado de producción a la 80 supusiera un punto negro a cierta integridad de chupa de cuero. Pero el tiempo además de curarlo (casi)todo te devuelve ciertas cosas con agrado, como este disco. Ayer me vino a la cabeza por otros motivos extra-musicales y lo pinché mientras andaba ordenando mis discos, al instante con My Brave Face paré mis labores y me senté frente a los altavoces, disculpen la nostalgia, pero es que me ha sabido a gloria, ni tan solo los tics propios de los arreglos de esa época han podido restarle encanto a las melodías que solo un beatle podría haber hecho. En cierta manera ha conservado ese encanto de ensoñación a través de los años, percepción muy personal.

Fijaros, entonces no tenía ni idea de quien era Costello, ni David Gilmour, para que os hagáis una idea. Los hilos estan para tirar de ellos, algunos cuajaron y otros no. El gancho de los singles de marras es indudable, My Brave Face funciona de llamada de atención, siendo la primera y la más escuchada me continúa dando el chispazo, como This One, la otra canción que radiaron bastante, buena elección de ambas como singles, son las que tienen más pegada, motivos suficientes para que me dejara seducir. Y es que Paul tiene una gran habilidad para sacarse melodias de una facilidad de absorción increible, sus canciones son como ir en bici, nunca se olvidan. Y este disco tiene una sobreproducción considerable, vale, pero a su vez encasta muy bien los excesos, y son esas canciones que suenan especiales las que al final dan personalidad al disco, Rough Ride por ejemplo y también fenomenal You Want Her Too con Costello de partener, al que querían entonces los medios en el papel de Lennon, pero a decir verdad, y con lo poco escuchado de Costello, es puro Costello, en We Got Married es David Gilmour quien deja su huella, una mezcla de Dire Straits (The Man's Too Strong exactamente minuto 1:22, muy similar, ochentas everywhere) y Pink Floyd, muy buena, me encanta. Y como no, las baladas, su gran baza, Distractions es preciosa, obra maestra que no sé porque me suena a Cole Porter, algo que sólo él sabe hacer, y Put It There que es una obra maestra en sí, huele a RAM, huele a campo y a fajo de paja, es tan Ronnie Lane que casi podría deciros que es mi preferida, y ese toque gospel a la Macca de The Day is Done. También tiene alguna concesión a la radiofórmula, que no mala, Figure Eight, y el reggae de How Many People con unos arreglos de vientos muy bueno, los arreglos en este disco son de lujo. hasta la canción ligera y edulcorada de Motor Of Love me gusta, seguro que me dejo alguna. 

Me acordé de él, disculpen de nuevo la nostalgia, cosas de humanos y tal. Hubo una época en que mi particular cruzada contra lo que solía llamar "musica comercial" me apartó y dejó en el olvido discos como este, y ahora firmaría porque la música comercial sonase como este enésimo resurgir del eterno ex-beatle. Flowers in the Dirt es un muy digno regreso a primera línea, octavo disco con los tics de las producciones de los ochenta, bien entendidos y cuidados. Y Paul McCartney, un artista como la copa de un pino que hay que venerar por los siglos de los siglos, por lo que ha hecho y por lo que hace. En este disco queda patente su facilidad para las melodías que nunca se olvidan, azúcar que no engorda. Of my own.



Comentarios

  1. No esta nada mal el inicio de lka reivindicacion. como todos los beatles sus carreras en solitario palidecen respecto a lo que grabaron con el grupo Bendito George Martin, sin embargo tienen grandes discos y este es uno de ellos. Hay por ahí un piratillo que recoge las sesiones de Macca con Costello muy interesante. Ah me alegra que menciones el London Rown uno de mis favoritos y menos reconocidos discos de Paul

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pocos artistas hay en la historia del rock que hayan rozado la grandeza de los beatles, partiendo de esa premisa me parece que macca tiene canciones en solitario que si llega a esa grandeza, tiene bastante obra desconocida sir Paul, buscaré esas sesiones, pinta muy bien, gracias por el aporte Barnardo. Saludos

      Eliminar
  2. A mi tambien me pilló de lleno, aunque fué mas Off The Ground (del 93) el que mas me caló.

    Es un buen disco, suficiente para reavivar a la figura de Paul ante las nuevas generaciones. Y se nota la mano (bendita) de Costello. My Brave Face es un tema que en su día pensé que era de los Beatles. Con eso lo digo todo.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El Hope of Deliverance también sonó a tutiplen en aquel 93, no sñe porqué a mi no me caló, y creo, además con lo expuesto en el post, que en aquellos años estaba a otra cosa, chupas de cuero y tal y tal, ya sabes que Macca es uno de mis handicaps pendientes y Off The Ground podría ser otro buen paso para ampliar un poco más su grandeza en mi ideario musical. Es verdad, My Brave Face es muy Beatle, hay unas cuantas en este disco que los recuerdan bastante en la manera de cantar de Paul. Saludos Mansion.

      Eliminar
  3. una vuelta a lo grande de Macca, que estaba muy perdido. Tuviste suerte de disfrutarlo con más luces que yo. My brave face, this one o put it there están entre lo mejor que ha grabado

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ni que lo diga, ese trío le añades Distractions y You Want Her too y tenemos un buen repoker de canciones, gracias por pasar Félix. Saludos

      Eliminar
  4. Un buen disco de Macca, y ya iban unos cuantos. Personalmente me gusta más Off The Ground; ahí tiene mi favorita de él: Don´t Get Out Off My Way

    Grande, Chals. Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Un buen disco Off The Ground, escarbandi siempre pueden encontrrarse unos cuantos a un alto nivel y más allá de los beatles. Gran canción tu preferida, un arquetípcio rock'n'roll de libro, enésima reinvención de Johnny B Good. Saludos

      Eliminar
  5. Gran disco que precedía al fallido Press, además trajo consigo la vuelta a los escenarios de Paul, con la grabacion de aquel Trippin con gran presencia de este disco, impagable la aportación de Costello y a pesar de todo un tanto olvidado como casi todo lo editado por Paul y por todo hijo de vecino en los ochenta.
    Gran reseña, como siempre.
    Abrazos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Saludos Addi, gracias por tu aporte y por pasar.
      Saludos

      Eliminar

Publicar un comentario