Courtney Marie Andrews - May Your Kindness Remain (2018)

Courtney Marie Andrews, country, americana, folk-rock, folk

La joven Courtney Marie Andrews ha hecho un disco que ya desde su portada rememora muy bien aquellos años 70 cuando country y soft rock se convirtieron en el lenguaje musical predominante, me vienen a la cabeza Emmylou Harris y Linda Rondstad y aquellos discos de repertorio ajeno liderando a los mejores músicos del género, todos con un mismo fin: lograr registrar las mejores versiones de cada canción. Sólo que en este disco las canciones son suyas y no estamos en los 70. Es su sexto disco y como ha venido demostrando es un valor seguro que entrega calidad a cada nuevo disco, y aunque la verdad es que no estaba en mis planes reseñar este May Your Kindness Remain pues a los pocos segundos dan ganas de recuperar las influencias fundamentales que arrastra. Al final me pasó algo similar con el disco de Ryley Walker hace unos años salvando las distancias estilísticas, como quien no quiere la cosa, y como me pasó con Walker, ha ido mojándome como la fina llovizna que no molesta pero te cala hasta los huesos.

Es buena Courtney Marie, es muy buena, y ha hecho un disco que para nada se queda atrás junto a las grandes, siempre y cuando dejemos de lado la repercusión e importancia en la historia de la música de tal o cuál artista. Su voz es prodigiosa desde estos derroteros del country clásico, acercándose desde una producción grandiosa y digna de la década dorada a otros géneros colindantes, folk, americana, incluso hay coros gospel. Destacan unos teclados que dan una gran amplitud y una profundidad casi litúrgica, casi de banda sonora, también unas guitarras que cuando aparecen dejan una huella hiriente y que a su vez la enlazan con el presente musical. Y no podía faltar una pedal que amarra las costuras con mucha clase. Esta chica lo tiene.

Courtney Marie AndrewsEntramos en la catedral a través de su órgano en la inicial May Your Kindness Remain, un canto visceral a las cosas que importan en la vida, su sensibilidad y su voz soprano y dulce, acompañada de un coro gospel, contrastan con una guitarra cortante, una canción que de primeras muestra todas las virtudes de este disco. Canciones de su puño y letra, historias cotidianas, This House, de amor sincero y de dolorosa ruptura como el baladón Lift the lonely from my heart que puede darte un ataque de dulce melancolía. También se atreve de manera brillante a hacer su crítica social con mucho tacto y sensibilidad, por ejemplo a la inmigración en Border, y denuncia la situación actual de su país y pone en entredicho el sueño americano, como resistirse a la más directa y a la guitarra de Two Cold Nights In Buffalo?, me acongoja sobremanera.

Courtney Marie cruza la fina línea que la separa del simple easy-listening resultón y bien hecho, que quede claro que no es un disco de simple pasteleo impersonator, sólo dadle a Kindness Of Strangers que fue el gancho que me hizo caer en las redes de este disco, incluso evoca las grandes canciones de Neil Young de su fastuoso Harvest, un temarral como la copa de un pino que debería estar en cualquier playlist anual que se precie. Pero ojo, detrás de esa imagen de joven dulce y sensible, I've Hurt Worse descubre una letrista mordaz dispuesta a romper los estereotipos más manidos en las historias de relaciones mujer/hombre. Despide este disco Long Road Back To You, crema absoluta, y me viene a la mente Richard Hawley y lo que el inglés pagaría por las composiciones de esta joven, pero por favor! ¿que les dan de comer por allá?!.

No sabría si deciros si es mejor que su anterior Honest Life pués la única diferencia es el enfoque instrumental, en aquel más directo, aquí mucho más amplio y detallista. Lo que tengo claro es que para los amantes del género, para quienes gustan del country de etiqueta y de las interpretaciones sentidas y sinceras, la bonita y prodigiosa voz de Courtney Marie Andrews les descubrirá oro en este May Your Kindness Remain y unas cuantas canciones que le van a sobrecoger. Seguro que en otra época este disco hubiera vendido millones de copias copando las listas mainstream setenteras del momento. Hoy en día un disco como éste es una joya en un amplio mar de oferta musical, me alegra que forme parte de pequeños sellos como Fat Possum/Loose Music que cuida con esmero a todas las referencias en su nómina. Déjense arropar por esta delicatessen country.

Comentarios

  1. Chals, este disco lo escucho y no sé qué me pasa. Me gusta pero lo veo...Llego aquí de nuevo y vuelvo a leer tu reseña de nuevo...y vuelvo a escucharlo y no sé...lo veo...muy muy que tiene gimmick que dicen los angloparlantes .

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    1. ja ja ja muy bueno eso de gimmick Joserra, he ido a buscarlo. Pués a ver, a mi me encanta, y esa portada invita a pensarlo y es que se mete en terrenos donde pocas han salido con la excelencia por bandera, es inevitable tener a Emmylou y a Linda y a Dolly protegiendo ese territorio. También te digo que en otros ámbitos del pop-rock también aceptamos algún que otro gimmick, ja ja ja me gusta ese término.
      Gracias Joserra, quizás tengas razón, el tiempo me lo aclarará.

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    2. Realmente a esta artista me gustaría mucho verla en directo defendiendo estas canciones.

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