Ya sé que he pensado ésto antes. "Done This One Before" Ronnie Lane's Slim Chance

Últimamente Ronnie Lane se ha instalado, y creo que de manera definitiva, en mi propia historia músical, sin buscarlo y de rebote, a partir de los Small Faces y también del post del otro día sobre el disco con Pete Townshend, he dado con los discos de este pequeño gran genio, y ahora mismo ando fascinado con entrevistas, biografías, todo lo que pillo por delante, hasta el punto de cogerle cariño, fijaos que tontería a estas alturas. 

Lo tengo idealizado, no sé si por su música, tan lejos de cualquier cosa que se hacía en UK a mediados de los 70, o por su aparente carácter afable, o puede que el estilo de vida que llevó alrededor de la música, lejos de las fiestas privadas, de los grandes supergrupos, él inventó su propia caravana, el Guy Bus, su casa a cuestas, y con su Lane Mobile Studio daba salida a su música, y en el que por cierto se grabaron muchos buenos discos en los 70. 

Esa era la auténtica vida en la carretera, ¿que sentido tendría para Ronnie defender algo encima del escenario si minutos después del concierto tuviera que largarse pitando con su jet privado para pasar unas escasas horas a todo lujo en la mansión?, más lógico y coherente fue vivir como un gitano por la campiña. Lástima que su enfermedad atajara tan maravillosa propuesta, y se nota por los artistas que le rodeaban que a Ronnie se le quería si o sí. 

Puede que en su día, incluso hoy se le considere una especie de freak del rock, pero tal y como están las cosas, hoy por hoy le admiro, no me gustaría volver a lo de antes como muchos pretenden, cosa que aunque quisiera no podría (ya no hay trabajos como los de antes, de eso ya quedé convencido hace bastantes meses). Estoy empezando a entederlo ahora. Prefiero la elección de Ronnie, desentenderme de la rueda que gira inexorable y pesada, salirme del juego, sacar a mi Rebe de ese estrés diario que por días la oscurece y absorve la energía, y con suerte nos desharemos de este gran bloque de hormigón que nos ata al suelo, quiero aprehender ese estilo de vida, que sólo hay una y no quiero ofrendarla, ni la mía ni la de los míos, a quienes ya sabéis. Sé que ese día llegará, lo tengo claro como que Ronnie Lane me lo cuenta cada vez.

Todo ésto que cuento no tendría sentido si su música no me llegara como me llega, como un George Harrison al que no le ha hecho falta ir a la India para entenderlo todo, como a The Band versión campiña inglesa, menos relevante, pero con la misma profundidad. Vamos Ronnie, ya sé que he pensado ésto antes, pero ¿para que pedir la luna?...